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Vamos con la primera pregunta:
Pregunta: ¿Cómo hago para educar a un gato muy agresivo?
Recogí a un gato ayer, no sé exactamente su raza, pero me bufa y me araña cada vez que me ve. Si me acerco a su cuenco me muerde y mientras duermo, a mí y a mi hijo intenta atacarnos en los ojos. ¿Qué debo hacer?
Respuesta: Este caso exactamente lo he tenido yo con una gata medio montesa, parece muy complicado, pero no lo es tanto. Lo primero a la hora de tratar trastornos de comportamiento en animales es ponernos un poco en su piel y pensar como actuaríamos nosotros. La mayoría de personas al más simple arañazo (sobretodo a sus hijos), en lo primero que piensan sin ninguna duda es en devolver al animal a donde lo encontraron, para mí eso es un acto total y ruin de cobardía. En este caso, si nos asusta un poco que pueda atacarnos, lo mejor es dejar al animal en una habitación a solas, de ese modo no nos atacará mientras dormimos. El segundo punto es ponernos unos guantes gruesos y examinar al animal, mirar si tiene algún tipo de molestia o enfermedad. Aunque no os lo parezca, cualquier enfermedad dolorosa, puede convertir al animal más manso de la tierra en un animal muy agresivo. Pensad en cuando tenemos dolor de cabeza, cuando nos hablan nos ponemos a despotricar enseguida contra cualquier mínima molestia por la parte de cualquier otro humano, lo mismo ocurre en los animales. Si no estamos seguros sobre su estado de salud, lo ideal sería llevarlo al veterinario y que examinase al felino, para que pueda ver si tiene algún tipo de dolencia y poner tratamiento a vuestro nuevo compañero de cuatro patas. Si el animal está totalmente sano, lo que debéis de hacer es empezar con el entrenamiento. Seguid estos pasos para ello:
1º.- No demostréis miedo en ningún momento, pero tampoco actuéis de forma violenta, sólo demostrad serenidad. Procurad que el nombre del animal no sea muy difícil de recordar y que sea un nombre que no lleve a pensar en agresividad como por ejemplo "Diablo". Coged un guante grueso mientras lo entrenáis y jamás juguéis con las manos, este acto los puede confundir. Por último el otro detalle a tener en cuenta es que los animales siempre avisan antes de un posible ataque y los gatos son muy expresivos, siempre debéis tener en cuenta el no perder de vista el estado de ánimo del animal.
2º.- Coged un peluche pequeño, que podáis manejar y que no os importe que sea destrozado. Los animales, a diferencia de las personas y de lo que podamos creer, no atacan por placer o por hacer daño, simplemente lo hacen por miedo, como una defensa, cuanto más un gato callejero. Entrad en la habitación donde esté el animal. El equipamiento con el que debéis contar cuando tratéis con un gato agresivo es: zapatos normales o zapatillas de deporte, pantalón grueso, camisa de mangas largas, guantes y el peluche pequeño. De ese modo no deberéis temer nada, porque por mucho que el gato quiera atacaros, sabréis por donde os atacará y no os hará nada. Con tranquilidad, acercaros al cuenco del gato y si el animal os intenta atacar, echadlo hacia atrás con el peluche. Coged el cuenco y ponedle comida cuando veáis que el gatito se ha tranquilizado, luego dejadlo que coma tranquilo, sentáos junto al animal y tranquilizáos. Mientras come es muy posible que gruña y que os mire como cabreado sin levantar la cabeza del cuenco, este comportamiento es natural, sólo piensa "¿quién será este tipo de dos patas que me está incordiando? ¿Querrá hacerme daño o quitarme de nuevo mi comida?" Esto es sólo porque el animal está asustado. Un detalle importante es no acariciar al gato si nos mira de este modo, jamás, con o sin comida, pues el felino no va a saber si lo que quieres es atacarle o acariciarle y le fomentaréis el miedo y os puede llegar a atacar a la cara. La postura exacta es: cuerpo echado, cabeza cabizbaja, orejas ligeramente hacia atrás, mirada de reojo con el ceño algo fruncido y en general tenso.
3º.- Cuando el minino haya acabado de comer, es momento de continuar, intenta coger o remover un poco de comida, el gato quizás vaya para ti e intente atacarte, pero dale suavemente con el peluche. El peluche el efecto que hace es como otro compañero felino o de otra especie, la cual le está diciendo "no le ataques o te las verás conmigo", intenta hacer a la vez una onomatopeya, pues entonces el gato creerá que ese ser está vivo y que te protege. El gato al principio atacará al peluche, eso debes dejarle, sólo se está desestresando, que es algo que queremos. El animal ha sufrido maltrato y daños por parte de todos, está estresado, debes darle tiempo. Eso sí cuando le des con el peluche, no le des fuerte, con un toque suave sirve, siempre hazlo flojito, porque el animal lo puede interpretar como un ataque y puede ocasionar más estrés, pues no sabrá por qué ese "bicho" lo ataca. El peludo debe interpretar ese toque como una simple advertencia, como una simple defensa, no como un ataque. Si el animal se acuesta déjalo en paz por ese día y vuelve a repetir todos los pasos al día siguiente. Todo el proceso para domesticarlo, requiere mucha paciencia y puede llegar a tardar desde una o dos semanas hasta un mes y medio, todo depende del gato.
Todos estos pasos llevan sus consejos, ya que aunque parece tarea fácil, no lo es del todo si no sigues los consejos. El motivo del peluche es también para que el animal crea que no eres tú el que te defiendes, es decir, que el peluche es como un intermediario de una pelea, él defiende al que es débil. Eso sí mis consejos al elegir el peluche, que no he puesto ya son: que si es posible sea un peluche de un felino o un perro (ya que estas especies les son más conocidas y les hará más caso) por supuesto no lo cojas de pelo largo, ya que se le atascarían en la tráquea los pelos y le causarías más mal que bien y por supuesto que el peluche jamás sea electrónico, ya que pueden pasar accidentes como que mastique los cables o que llegue al sistema de pilas y/o sonido y puede llegar a morir.
Sin más espero que os sirva, cualquier duda podéis contactar siempre conmigo. Este proceso os puede servir tanto con perros como con gatos. Por cierto, tened siempre en cuenta de no usar ni collares de castigo, ni técnicas como las que véis en Bestial de lanzarle a vuestra mascota cosas, ni darle con la correa... Todas estas técnicas abusivas y agresivas, no van a mejorar nada en vuestro animal, pues él ataca por miedo y como defensa, si realizáis cualquiera de estas barbaries que atentan contra el bienestar de vuestro animal, sólo conseguiréis una cosa y no será respeto sino odio. Al principio funcionarán todos estos malos actos, hasta que el animal se harte y os dé una lección a su forma... después no sería la culpa del animal, sino vuestra. Si un etólogo (persona que se dedica a la psicología y adiestramiento animal) os recomienda usar cualquiera de estos actos tan horrendos, cambiad de profesional cuanto antes. Cuando domestiquéis a vuestra mascota, tratadla siempre con cariño y jamás a gritos. Un último consejo que se me olvidaba, cuando veáis que vuestro animal ya hace algo bien, como quedarse manso o cualquier otro buen acto, dadle un premio, un snack, de ese modo verá que si no ataca, recibirá una gran recompensa. Buenos días a todos y espero que este y otros más artículos que iré subiendo, os conviertan a todos en unos grandes adiestradores de vuestros peludos.
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